NOU CAMP

Pelé y otras leyendas que jugaron en el Nou Camp

Edson Arantes do Nascimento regó su magia en el Estadio León, como otras figuras mundiales

Pelé con Santos.
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A partir de su inauguración en 1967, el Estadio León pareció haber aceptado aquel destino legendario que, quizás, ya se tenía escrito desde la primera piedra que marcó un antes y después en la historia del deporte leonés. 

Llamado también Nou Camp, el recinto es apodado por muchas personas en el medio como “El Glorioso” y, tal vez su origen, tenga que ver con las leyendas que han pisado el pasto que tantas historias guarda en su característico color verde. 

Todo inició el 1 de febrero de 1967 cuando “El Rey” Pelé hizo acto de presencia con su Santos de Brasil para enfrentar al River Plate de Argentina. 

La visita del gran O'Rei es especialmente relevante hoy, al confirmarse la muerte de Pelé por cáncer de colon.

Pero esa visita de 1967 solamente fue el inicio de una historia inigualable en un recinto que, al día de hoy, puede presumir de haber presenciado la magia de distintos jugadores en una Copa del Mundo. 

Pelé (Santos y Brasil)

En 1967, Pelé visitó el Nou Camp justo para el duelo inaugural, al enfrentarse el Santos de Brasil y el River Plate de Argentina.

Considerado ya el mejor futbolista del planeta, Pelé marcó un gol en ese amistoso, por la vía penal.

Tres años después, Pelé volvió a Guanajuato, esa vez para la preparación de Brasil rumbo al Mundial de 1970.

Pelé jugó un amistoso contra elementos locales en el Nou Camp y volvió a mostrar su magia, aunque el duelo fue sin público.

Franz Beckenbauer (México 1970)

El Kaiser’ aterrizó en el Bajío para disputar cuatro partidos en el Mundial de México 1970.

El histórico jugador del Bayern Munich fue pieza importante para que Alemania Federal solamente recibiera seis goles en todos los cotejos que disputaron frente a la afición leonesa. 

Por si fuera poco, el férreo defensor ayudó a su propia causa con una anotación en los 4tos de final ante Inglaterra. 

Beckenbauer corriendo sobre el pasto del Estadio León. Foto: Mexsport.

Uwe Seeler (México 1970)

Ya estaba retirado luego de disputar tres Copas del Mundo, pero decidió asistir al cuarto y último de su carrera ante la insistencia de la afición y Helmut Shön, el técnico de la selección. 

Seeler, con suma experiencia, ayudó a sus compañeros y, jugando en el ataque, el longevo jugador se despidió de forma internacional con tres goles: uno ante Marruecos, otro ante Bulgaria y uno más frente a Inglaterra, siendo este último con un gesto técnico increíble e histórico.

Todos los goles fueron anotados en el Nou Camp. 

Gerd Müller (México 1970)

Ocho goles fue la cosecha de “El Torpedo” durante su estancia en el Bajío, ciudad que fue testigo de la calidad de este jugador con dos tripletes ante Bulgaria y Perú en fase de grupos. 

En el último partido de los alemanes en León, Müller decidió despedirse con el gol de la victoria en 4tos de final ante los ingleses, en un cotejo sumamente histórico y emotivo. 

Müller jugando en el Estadio León. Foto: Mexsport.

Teófilo Cubillas (México 1970)

Considerado por muchos como el máximo referente del futbol peruano, Cubillas brilló con su selección al cosechar cinco anotaciones durante la participación de Perú. 

Jugando los tres partidos de fase grupal en León, “El Nene” demostró su potencial y marcó en todos: uno a Bulgaria, dos a Marruecos y uno más a la Alemania Federal. 

Mediocampista por convicción pero delantero por naturaleza, el peruano se llevó el premio al “Mejor Jugador Joven” al terminar como el tercer mejor goleador de la competencia. 

Fue tanta la euforia que, hasta el mismo Pelé, lo catalogó como su sucesor: 

“No se preocupen, ya tengo un sucesor y es Teofilo Cubillas”. 

Gordon Banks (México 70)

El segundo mejor portero del Siglo 20 jugó en León y lo hizo en la serie de 4tos de final ante la Alemania Federal. 

En aquel entonces, Banks era Campeón del Mundo y México 70 fue su despedida de la Selección de Inglaterra, pues dos años después, sufrió un accidente de tráfico que le provocó la pérdida de visión en su ojo derecho. 

El Nou Camp fue testigo de los lances y atajadas del máximo competidor del ruso Lev Yashin, el único guardameta en la historia que ha ganado un Balón de Oro (1963). 

Booby Charlton (México 70)

Este Mundial fue el último de su carrera para Sir Bobby Charlton, quien es catalogado como uno de los mejores jugadores ingleses de todos los tiempos. 

El recinto presenció la magia en los botines de Charlton, siendo el último que visitó en su trayectoria mundialista. 

Íhor Belánov (México 86)

Parte de la Unión Soviética, este delantero ucraniano es uno de los grandes referentes del futbol soviético en aquella época. 

El artillero marcó cuatro goles para su causa, dejando para el recuerdo el juego ante Bélgica donde, a pesar de que el resultado final fue una derrota, anotó un triplete que demostró su calidad sobre la cancha del Nou Camp. 

Michel Platini (México 86)

Considerado uno de los mejores mediocampistas de todos los tiempos, el francés jugó en la apodada “Capital del Calzado” en donde desató una algarabía con solo hacer acto de presencia. 

Platini jugando en León.

Aunque su nivel en el terreno de juego quedó a deber, el trato con la afición leonesa es algo que, hasta el día de hoy, varios siguen recordando al haber arropado a los galos en los juegos ante Canadá, Unión Soviética y Hungría. 

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