El Club León y los Diablos Rojos del Toluca volverán a verse las caras en el futbol mexicano, el duelo de este domingo en el torneo Guardianes 2021 hace recordar a varios jugadores que han defendido ambas instituciones, pero en específico el nombre de Luis Alberto Islas, es uno que no puede dejarse de lado debido a sus polémicas y problemáticas situaciones.
El nacido en Buenos Aires, Argentina, saltó a la fama internacional luego de ser el arquero suplente de la selección "Albiceleste" que se consagró campeona del mundo de la mano de Diego Armando Maradona en el Campeonato Mundial de México 1986.
De ahí logró hacer carrera en varios clubes a nivel internacional como el Atlético de Madrid, por lo que a mediados de los noventa se abrió una oportunidad de venir y mostrarse en el balompié azteca por lo que el cancerbero aceptó.
Toluca y León
Primero en 1996 y procedente de Platense, Islas decidió aceptar ser fichado por los Escarlatas con quienes figuró hasta 1997 acumulando un total de 53 partidos para posteriormente regresar a Argentina en donde jugó para Tigre y Huracán.
Era el ocaso prácticamente de su carrera, pero luego de jugar en México logró llamar la atención del entonces directivo esmerlada, Roberto Zermeño, quien negoció con el jugador y logró regresarlo con el León para jugar de 2000 a 2002.
De la polémica al problema
Si bien su calidad siempre fue un punto a favor, cuando jugó para Toluca fue considerado uno de los refuerzos más rimbombantes en el futbol mexicano, por lo que su salida fue una de las más llamativas, confirmada por uno de los directivos de mayor peso en aquellos tiempos como lo fue Rafael Lebrija.
En el 97, Enrique "Ojitos" Meza era el director técnico de los "Choriceros", su auxiliar era Rafael Chávez Carretero, quienes como altos mandos dentro de la cancha, buscaban hacerse pesar ante una generación de jugadores que posteriormente dieron grandes resultados.
Justamente ese manejo de vestuario no fue algo que gustó a Islas, por lo que uno de sus principales roses se dio con Chávez Carretero, quien de acuerdo al periodista Antonio Ezquivel Bernal (Quien dio seguimiento al caso para "Crónica") citó en una frase como el auxiliar definió al argentino:
"Es como una manzana podrida que si seguía así echaría a perder a todo el grupo".
Ante la enemistad entre el portero y el cuerpo técnico, el periodista relata que el propio argentino habló con Lebrija, pidiendo:
"O se va Meza o me voy yo", por lo que la directiva mexiquense decidió acabar el problema rápidamente y le dio las gracias al cancerbero.
Años más tarde y con todo este antecedente de por medio, la entonces "pintoresca" directiva esmeralda de principios del llamado "nuevo milenio" apostó por Islas, sin saber que la historia se repetiría.
Para mala suerte del sudamericano, volvería a toparse con Chávez Carretero quien ahora se desempeñaba como timonel del León y pese a que las cosas fluyeron al inicio, el final fue por demás parecido a lo sucedido en Toluca.
Un 18 de marzo de 2002, la directiva verde confirmó que, tras 44 partidos disputados con la Fiera, Islas era separado del club:
"Luis Alberto Islas queda separado del Club León por varias razones que nos expuso por escrito el técnico y que en su momento daremos a conocer, entre las que más destacan son las indisciplina y la falta de entrenamiento".
Y es que, de acuerdo al propio Zermeño, el entonces estratega de la Fiera reportó que Islas recurrentemente faltaba o llegaba tarde a los entrenamientos, además de no acatar las instrucciones de concentración giradas por Chávez Carretero.
Así el argentino fue separado del plantel agravando aún más la situación por la que atravesaban y es que el León de aquellos tiempos sumaba seis unidades por 12 partidos disputados, ocupando el último lugar del grupo 3, situación que se alargó hasta el adiós de la Primera División.