El camino por donde la vida se mantiene encendida quedó allanado gracias a lo que no han hecho otros equipos a pesar de lo que no ha hecho la Fiera.
No obstante del evidente bajón del León en el torneo, sobre todo en la recta final, la buena fortuna le sonríe al cuadro de Larcamón. Clubes como Santos, Pachuca, Mazatlán, Juárez y Cruz Azul dejaron ir puntos importantes en su afán de meterse mínimo en el Play In. Esto, le permite a los Esmeraldas depender de ellos mismos en la Fecha 17 para seguir en la pelea.
Este domingo, en el partido final de la etapa regular del Apertura 2023, la Fiera se juega ante Bravos, y ante la afición leonesa, el boleto a la ronda “mafufa” que inventó la Liga Mx.
Nunca hubiéramos pensado que un duelo entre León y Bravos fuera tan importante para la causa esmeralda. Es más, diría que es un partido en el que los nervios pudieran tensarse al máximo.
De ganar, el consuelo será avanzar al Play In. De no hacerlo, el León cumpliría dos años sin jugar una Liguilla que disputan ocho por el título.
Desde la corona conseguida en el Guardianes 2020, la Fiera jugó otra final en el Apertura 2021, pero también ha sumado cuatro torneos sin calificar y en estos momentos se encuentra en la frontera de agregar un quinto.
Haciendo memoria, en el Guardianes 2021 perdió en la repesca contra Toluca, en el Clausura 2022 ni al repechaje llegó, en el Apertura 2022 cayó en la reclasificación ante Cruz Azul, mientras que en la misma fase del Clausura 2023 sucumbió con San Luis.
Por eso, Larcamón se juega mucho ante Juárez. En el siguiente duelo, tiene poco qué ganar y mucho qué perder.
Después de llegar con una expectativa alta, en la cual me incluyo, el timonel argentino se mueve entre los intentos urgidos de agarrar la sartén por el mango.
Fuera de todo pesimismo, la realidad nos exige a que efectivamente miremos de frente el fracaso en el que puede caer el León en la Liga.
Con dos intentos y en caso de no avanzar, Larcamón estaría peor que Holan y Paiva. Una tercia de técnicos que no pudieron darle al León un boleto a la Fiesta Grande en los últimos tres torneos.
A falta del juego dominical, el León registra la peor suma de puntos en un torneo desde el título de hace tres años.
Sabemos bien que ganar ante la afición leonesa es la gloria en el Glorioso, pero perder en un partido como contra Juárez, puede representar un verdadero diluvio de abucheos. Los seguidores esmeraldas conocen y apoyan al máximo, aunque también saben dejar caer el rigor de su sentencia.
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