Este 3 de junio se cumplirán exactamente 35 años de aquel triunfo que se forjó desde las mismas entrañas de quienes querían destacarse en el futbol y de esos jugadores que, con el orgullo de ser leoneses, sacaron del hoyo a un club que merodeaba con la bancarrota.
Fue para los Panzas Verdes una etapa en la Segunda División, dentro de una década de los ochenta, digna para el olvido.
La crisis económica trajo consigo malos resultados y tribunas vacías. Para la tercera campaña en el infierno de esta división, el León fue armado con futbolistas jóvenes a los que no se les apostaba mucho. Un plantel sin estrellas ni estrellitis. La mayoría, jugadores de la ciudad extraídos del meritito llano leonés.
De los que llegaron de otros lados, algunos tuvieron que refugiarse debajo de las gradas del Glorioso y todos soportando, incluso, meses sin sueldo.
Boteo a la salida de los partidos para pedir coperacha y conatos de huelga, fotos en los periódicos con futbolistas desesperados y a la vez enojados por la mala administración, predominaban más que las emociones dentro de las canchas de juego.
Aparecieron los apellidos de Márquez y Zemeño para echar mano en lo administrativo, removieron el banquillo y trajeron a la dirección técnica a Vucetich.
“Vuce” revivió el ánimo futbolístico y comandó la reacción de un equipo verdiblanco que comenzó a creer en sí mismo.
Tras una larga liguilla y calificar a la Final con una goleada sobre Querétaro, el León enfrentó al favorito Inter de Tijuana.
Así comenzó
El primer duelo fue clave para el ascenso, un contundente 3-0 a favor de los Panzas Verdes marcó el destino. Un gol de Turrubiates y un doblete de un endemoniado y pícaro “Peñita” nos hicieron vibrar en un, ahora sí, abarrotado Glorioso.
La vuelta solo fue cumplir con el trámite. Vimos por televisión el empate a uno en el estadio del Cerro Colorado. El tanto del “Poncharelo” Andrade selló el ascenso.
La ciudad se alegró y cómo no hacerlo, de estar besando al polvo, el León volvía a ser de Primera.
Así, hoy recordamos a quienes devolvieron la gloria: Leonel Ortiz, “Beto” González, “Tena” Murgía, “Lupillo” Castañeda, “Jimmy” López, “Venadito” Bravo, “Peñita”, Marco Fabian, Ricardo Enríquez, Turrubiates, “Poncharelo” Andrade, “Pollo” Venegas, Marcial Márquez, así como Pepe y Antonio Rodríguez, entre otros, fueron lo héroes de un ascenso logrado con sudor y sangre.
Hoy es viernes y es Viernes de Orgullo Esmeralda.
@geraslugo en X
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