León.- Para pelear un título debes ganar lo más que puedas y Nacho Ambriz es lo que está haciendo. Sin embargo, ganar sin ganar el juego clave es quedarse solo con el gusto de ganar.
En estos días, salió la estadística de Ricardo Salazar que pone a Nacho Ambriz como el estratega esmeralda más efectivo por encima de técnicos legendarios como José María Casullo, Washington Etchamendi y José Antonio López Herranz.
Ambriz ha disputado un total de 204 puntos y de estos ha cosechado 128 para el 62.74% de efectividad. Los números son fríos y a la vez muy sinceros. Pero en el futbol nada es frío, todo hierve y en muchas ocasiones la sinceridad queda incomprendida ante el peso de la subjetividad.
En las redes comencé a leer esa siempre interesante división de opiniones sobre lo que las cifras nos dicen ya que en el futbol la efectividad no es lo mismo que el palmarés, ser un técnico ganador no es lo mismo que ser uno triunfador y aún ganando mucho puedes terminar ganando nada.
Con Nacho Ambriz, el León ha cosechado 38 triunfos, 14 empates y 16 derrotas. Después de un inicio incierto a su llegada, el domador encontró la clave para revertir la mala vibra que había sobre él y también el triste accionar que sobre el equipo pesaba.
Ambriz cambió, dejó atrás su pasado con otros equipos y se atrevió a más con esta Fiera. Con ello el estigma de un entrenador defensivo y tibio desapareció.
La Fiera concluyó en la posición 14 del Apertura 2018 ya con Ambriz al mando. Se mantuvo Nacho en el timón y vino el repunte terminando como líder general en el Clausura 2019, sublíder en el Apertura de ese año y segundo lugar en el Clausura de la Pandemia.
Si les preguntamos a ocho, diez o quince equipos de la Liga MX, seguro nos responden que quisieran tener campañas como las del León. Si le preguntamos a Ambriz, seguro quisiera tener ya un título.
Por su modo de competencia, en el futbol mexicano hay técnicos que saben ganar una gran cantidad de juegos y técnicos que saben llegar a los partidos importantes y ganarlos.
A pesar de las magníficas estadísticas, Nacho Ambriz aún no entra al Olimpo en el que están Casullo, López Herranz, Víctor Manuel Vucetich y Gustavo Matosas. La llave a este bello lugar no viene añadida a los números sino dentro de una copa.
El dilema de Nacho Ambriz, y de muchos entrenadores, es que puede sostener a su equipo en los primeros lugares de la competencia sin estar exento de una mala tarde de su equipo, de algún error de un jugador, de un rival inspirado e incluso, de una mala decisión estratégica en el momento más inoportuno del partido más especial.
Y que esto no suene a justificar a los entrenadores. En el caso de Ambriz, él sabe que tiene equipo y un estilo de juego para coronarse y por ello la obligación resulta mayor.
Ya lo fue en dos torneos y volvería a ser triste, y para algunos hasta imperdonable, que Ambriz no lograra el título a pesar de sumar y sumar números con la Fiera.
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