Los Rojinegros del Atlas han firmado su mejor torneo en la última década, después de varios años donde estuvieron cerca del abismo con constantes problemas porcentuales.
De la mano de un sistema que prioriza lo defensivo, Diego Martín Cocca ha regresado a la Gran Final del Futbol Mexicano a los Zorros, tras 22 años de ausencia.
Es un equipo bastante peligroso, pues desde la portería hasta el último tramo de la cancha, muestran un orden plausible con los once jugadores en un nivel superlativo.
Este es el análisis del rival del Club León en la Gran Final del Futbol Mexicano, en busca del campeón número 105 en la historia profesional.
Camilo Vargas, seguridad en el arco rojinegro
El colombiano ha sido el jugador más constante del cuadro jalisciense desde su arribo en el Apertura 2019. Con un manejo de su área impresionante, Camilo Vargas fue uno de los principales artífices para llevarse el reconocimiento como la mejor defensiva del torneo al recibir sólo 10 anotaciones en 17 fechas disputadas.
El dorsal "12" del Atlas ya fue factor para que los Rojinegros esten cerca de la gloria, pues en la última jugada de la Ida de Semifinales ante Pumas, Vargas hizo la atajada de la eliminatoria con un excelente achique ante el disparo de Higor Meritao, evitando el empate y un hipotético regreso auriazul.
Anderson Santamaría y Hugo Martín Nervo, los líderes defensivos
Durante todo el torneo, Atlas siempre probó de manera constante la línea de cinco defensiva, donde los principales líderes fueron sudamericanos: el argentino Hugo Martín Nervo y el peruano Anderson Santamaría.
Con un liderazgo imponente, guiaron a este equipo a ser el mejor defensivamente hablando incluso hasta en la Liguilla, siendo ayudados por la juventud de Jesús Ángulo y Diego Barbosa, laterales con grandes recorridos de ida y vuelta por las bandas, sin dejar de lado la vasta experiencia del defensor de 30 años Luis Reyes.
Aldo Rocha, la máquina del mediocampo
Para muchos, el MVP de todo el torneo para el cuadro de Atlas y es que Aldo Rocha ha sido todo un contención en toda la extensión de la palabra para el sistema del técnico argentino.
Distribuyendo, manejando los tiempos, pensando la jugada, poniendo calma e imprimiendo intensidad cuando se requiere, el capitán Rojinegro se ha hecho ya un ídolo entre la afición atlista, siendo titular literalmente en todo el Apertura 2021.
Apoyo por las bandas
El aporte por las laterales por parte de Jairo Torres y Jeremy Márquez es imprescindible dentro del campo, pues no solamente pueden encarar por fuera, sino sorprender a la hora de interiorizar al crear un ángulo de disparo.
En un sistema que prioriza el abastecimiento de centros para los dos nueves fijos del cuadro atlista, el aporte de estos dos jugadores ha sido vital durante todo el torneo.
Julio Furch y Julián Quiñones, la dupla de la gloria atlista
Si a algo se debe la efectividad de Atlas al ataque es por estos dos auténticos artilleros en las áreas.
Aunque Julián Quiñones es más de hacer el llamado "trabajo sucio", suele intercalar posiciones con Julio César Furch, ayudándose constantemente y entendiéndose a la perfección a la hora de combinarse hacía el frente.
El toque sutil de balón, los movimientos al espacio, el encubrimiento del esférico y la contundencia a la hora de definir, son características que los rivales simplemente no han logrado nulificar.
Si de datos avasalladores hablamos, tenemos que poner a colación el siguiente: de los 21 goles en fase regular, en 20 estuvieron inmiscuidos tanto Quiñones como Furch, teniendo el primero cuota de cinco goles y cuatro asistencias, mientras que el argentino ocho goles y tres asistencias.