El festín era para los Pumas, tenían todo a placer, tres goles de ventaja sobre el Club León, un hombre más en la cancha y el ánimo por los cielos, pero las garras del puma no laceraron el corazón del León esmeralda.
Minuto 52, servicio desde la banda derecha, viveza de Lucas Di Yorio y con ese descuento la Fiera recibió algo más que una bocanada de oxígeno, fue una inyección que viajó directamente a la convicción de lograr una hombrada.
La balanza se desequilibró hacia el lado verde del partido. Hasta la suerte se puso de modo en aquel poste a disparo de Juan Dinneno que hubiera aniquilado cualquier intento de reacción del local.
La Fiera entonces sacó el ímpetu indomable que al menos en las dos primeras fechas ha estado por encima de un hashtag mercadológico.
Joel Campbell levantó aún más el ánimo en la volea que mandó al fondo de las redes y diez minutos después otra vez Di Yorio apareció vivaz al descuido defensivo de la visita para fusilar y sellar un despertar de locura que hace tiempo no se vivía en el Glorioso.
Las virtudes del León
Renato Paiva se aferra a sus creencias futbolísticas como domador de la Fiera y en eso se observa que una muy importante se está cumpliendo, su equipo cree en el equipo.
Este León juega con una actitud positiva y garra, cuenta con elementos que corren con inteligencia sobre el pasto, con jugadores que reconocen los momentos en los que se deben tomar los hilos del juego y con un killer que poco a poco comienza a destacarse.
Paiva debe mejorar varios aspectos del León
Aunque también debemos señalarlo, el furor por esta reacción esmeralda bajará y saldrán a relucir los detalles a corregir porque es una realidad que no siempre la actitud podrá entrar al rescate cuando lo futbolístico falle.
Si bien el León había recibido un gol de penalti en una reglista decisión arbitral y a pesar de contar con los arrestos para superar esa circunstancia, el equipo de Paiva perdió la orientación con la imprudente barrida de Osvaldo Rodríguez que dejó mermado al equipo y por un concierto de errores en la salida con el balón que pusieron el duelo en alarma.
La larga tenencia y la pronta recuperación, ejes centrales que Paiva ha manifestado tener en su filosofía, fallaron ante Pumas en una buena parte del duelo y complicaron el aparato defensivo verdiblanco.
La reflexión para Paiva se centrará sobre cuál es la posición correcta para Yairo Moreno, si por el centro o por el sendero, si se mantiene Iván Rodríguez como primera opción en el hombre contención o prueba con Fidel Ambriz, si a Fede Martínez le deja plasmar el sacrificio con más minutos en la cancha y no ser el primer sacrificado, si Luis Montes entra al final a resolver o lo hace al inicio para dejar el partido resuelto.
Se dice que siempre será mejor solucionar cuando se registran unidades en la tabla general.
Cierto es que Pumas no perdió, pero como si así lo hubiera sufrido. Cierto es que León no ganó, pero como si así lo hubiera gozado.
Esta vez no se sumaron tres puntos, fue uno solo, pero como si hubieran sido 10 gracias al arrojo en los momentos de angustia.
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