El Club León cerró la fase regular del Guardianes 2021 con una sufrida victoria de 2-1 sobre el Querétaro, para afianzarse en zona de Liguilla, aún esperando rival.
Ángel Mena marcó un doblete por la vía penal y la Fiera alcanzó así 26 puntos, aunque lo más valioso fue superar el trámite sin Montes, Colombatto, Tesillo y Navarro, por lo que Nacho Ambriz debió usar una alineación alterna, con los juveniles Hernández y Ambriz en una buena tarde.
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Mandones
Al minuto cuatro, Fernando González se encontró de frente con Gil Alcalá, pero El Oso le estrelló el disparo en el brazo derecho. La acción, eso sí, mostró la intención de triangular por el centro, con Ambriz y Mena sacando chispas.
Más caliente estuvo la zurda de Yairo Moreno, quien al “8 escapó por izquierda y disparó antes de la presión defensiva. El balón terminó en la tribuna de Puerta 10.
Los primeros arribos se dieron así, con la velocidad de Yairo y el apoyo de Osvaldito a su espalda, pero la siguiente clara fue un disparo angulado de Mena, desde la derecha, con ese toqueteo tan característico de la Fiera de Ambriz.
Los extremos casi se tocan al “24, cuando Mena escapó por derecha y sirvió impreciso hacia la izquierda, donde Meneses no pudo rematar. En el siguiente cobro de córner, Ángel reapareció para disparar de volea, pero otra vez pudo más el corte de la zaga, con una Fiera insistente pero sin puntería.
León hizo un “time back” en la pausa de hidratación y volvió para convertir el juego en práctica de tiro. Querétaro ni olía el balón, pero la Fiera lo que no conocía era el arco enemigo. Lo atacaron a placer, pero sin la rudeza necesaria para romperlo.
Al “37, en la menos esperada, Meneses centró por derecha y encontró el brazo enemigo. Jorge Isaac Rojas marcó el penal, validado por el VAR, y Mena cobró potente y al centro, donde Alcalá se esfumó para permitir el 1-0 parcial.
De ida y vuelta
Querétaro apostó por refrescar toda su media cancha, pero León mantuvo la egoísta defensa del balón, manteniéndolo siempre mucho más cerca de Alcalá que de Cota.
En ese ir una y otra vez, al “62 encontró otra pena máxima, ahora por un empujón de Mendoza sobre Dávila. Nuevamente Mena colocó la bola y la dinamitó, ahora directo al ángulo superior derecho, para el decisivo 2-0.
Como Gallo de pelea, Querétaro lanzó el espolonazo inmediato, con un Doldán en un cabezazo suicida que se convirtió en el 2-1, suficiente para alimentar la esperanza visitante y el tan conocido nerviosismo local.
La Fiera pudo “planchar” la tarde cuando Meneses marcó el 3-1, pero la acción fue anulada por fuera de juego y así la tensión se alargó al máximo.
Sumen el dolor de ver a Osvaldo Rodríguez al dejar el campo en camilla, con una lesión muscular, y el susto de un Silveira tirándose una chilena que Cota repelió con un espectacular lance hacia su derecha.
