Tal como sucedió en el Apertura 2018, Marcos Ignacio Ambriz Espinoza llega al Club León en un momento de crisis.
Las cosas, que no le salieron a su antecesor Eduardo Berizzo, tienen la esperanza de ser revertidas en su regreso al Bajío, donde logró dos súper lideratos, un récord de 12 victorias consecutivas y, hasta ahora, su único campeonato de liga como entrenador.
Pero los tiempos han cambiado. El futbol ya no es el mismo de hace cuatro años y nada se puede dar por sentado. Ambriz, en reiteradas ocasiones, lo ha dejado claro: “la pelota es redonda”.
Acompañado de esta filosofía, el capitalino, criado en Iztapalapa, jamás le cerró las puertas a la Fiera, externándolo a los medios de comunicación el sábado 24 de agosto del 2024, justo después de que León y Santos, su club de aquel entonces, empataran 1-1.
“Cuando estuve aquí, las cosas me salieron bastante bien. Hoy felicito a León y solo espero que sean más años de existencia porque la afición se lo merece. Agradecerle a la familia Martínez porque han hecho un buen trabajo”, comentó.
En aquel sábado, León celebró su 80 aniversario enfrentando a los de la Comarca Lagunera en el Nou Camp y fue por eso que Nacho felicitó a la afición, jugadores y directivos que lo hicieron posible.

Aunque no se quiso enredar en la nostalgia porque “los entrenadores solo estamos de paso”, un sentimental Ambriz respondió a la pregunta de un reportero: ¿Le gustaría volver?
“La pelota rueda. Hoy me debo al Club Santos y aquí tengo un grandísimo recuerdo. Cuando entré a la cancha me vinieron recuerdos bastantes emocionantes, pero uno es profesional”, inició.
“Yo no te puedo decir que no y qué tal si mañana llego. Yo creo que eso el tiempo lo dirá. Hoy estoy muy feliz en Santos porque quiero demostrar que puedo jugar con jóvenes y puedo hacer buen trabajo”.
Así, el tiempo ha dicho que, 401 días después de esta declaración, Ambriz regrese a León, trabajando de inmediato con el plantel de cara a la jornada 12, en la que los verdes recibirán al campeón y enrachado Toluca, que acumula cinco victorias consecutivas.

