Aún sin jugar del todo bien, a La Fiera el “Efecto James” le está alcanzando para que ligue ya dos triunfos en el arranque de torneo, y para que el panorama -al menos por ahora- luzca bastante esperanzador.
El Juárez de Varini es un equipo compacto, combativo y muy físico, que cuenta con buenos jugadores y que seguramente va a dar varias sorpresas en este Clausura 2025.
Y por tal razón, el duelo no fue sencillo para los Verdes.
Fue un primer tiempo muy complicado para el conjunto local.
A pesar de iniciar con James comandando la media cancha, a la Fiera se le dificultó generar jugadas de peligro sobre la meta defendida por Jurado, que dicho sea de paso, fue la figura de la visita.
Aunque la participación de Rodríguez fue destacada, está claro que aún requiere conocer más a sus compañeros, ya que el colombiano -a pesar de la poca participación que tuvo en su último equipo- juega a otras revoluciones, y de a poco tendrá que ir entendiendo el ritmo de esta liga.
El segundo tiempo comenzó con otra actitud por parte de León, y esto rápidamente se vio reflejado en el penalti sobre Ayón, cobrado magistralmente por el propio Rodríguez, quien se estrenó como goleador en nuestro país.
En ese momento parecía que se abría la puerta para La Fiera. Pero demostrando oficio y en base a su estilo ríspido, los juarenses continuaron en lo suyo, complicándole el resto del trámite a los de casa.
Y es que después del gol, las oportunidades al frente volvieron a escasear para el León, en donde se debe seguir trabajando el tema de la contundencia.
Además, el esfuerzo y la intensidad vividos bajo el inclemente sol en la primera mitad, parecieron poco a poco cobrarle factura en lo físico a los Verdes.
Berizzo tuvo que echar mano de Cádiz y Salcido para refrescar su ataque.
Y el descontrol se extendió en ciertos instantes a un agotado cuadro bajo verdiblanco, teniendo que emplearse a fondo un par de veces Oscar Jiménez, ante los aislados embates de un cuadro visitante que buscó el empate hasta el final.
Por el lado leonés, se debe destacar el buen partido dado en la mitad de la cancha por la dupla Estrada-Fonseca, y el cambio que se dio adelante tras el ingreso de Cádiz.
Emiliano Rigoni da chispazos, y de alguna manera cumple con la función que tenía Diego Hernández el torneo pasado, pero se sigue esperando más de él.
Es obvio que el cuadro esmeralda requiere aún de mucho trabajo, pero siempre será mejor realizarlo con el respaldo de dos triunfos.
Se viene un duelo muy importante ante Chivas, en el que el León puede dar un salto importante, en caso de conseguir la victoria.